SER-enidad
«Este enfoque o punto de vista, puede resumirse en esta premisa básica: sólo hay lo que siempre es».
«SER no puede “ser un no-ser” ni, por tanto, comenzar a ser o dejar de ser. Lo que ES, ES. Sin principio ni fin ni condicionamiento alguno. De modo que, si hay una Realidad que es y permanece siempre (y es obvio que la hay, todos somos testigos de su variopinta apariencia), más allá de las formas variables y transitorias en las que se manifiesta, entonces no hay otra cosa que dicha Realidad o Ser absoluto; y esa es, necesariamente, nuestra auténtica naturaleza o genuina identidad, que es incondicionada, ilimitada, plena, perfecta».
«No hay caminos, procesos o etapas para “llegar a ser” lo que siempre somos, porque no hay nada aparte de lo que siempre es/soy/somos. Solamente la sugestión de ser sujetos separados-limitados, habiendo asumido la cultural identificación con el nombre y la forma, vela virtualmente el recuerdo o reconocimiento de nuestra naturaleza auténtica. Podríamos decir que el actor, durante el rodaje de la película, se olvidó de sí y creyó ser el personaje que representaba, asumiendo como reales su identidad, forma, personalidad e historia personal ilusorias».
«Así, cuanto más se asume y se siente la íntima Realidad del Ser, nuestro estado natural de serenidad se desenvuelve y manifiesta de manera paulatina, como paz, confianza y contento incondicionados, no sujetos ya a ninguna circunstancia aparente.
Mas todo ese proceso no podría ser más que un sueño (aquel holograma, película u obra teatral de la que hablábamos), pues solo hay lo que siempre es-soy-somos: SER».
Álamo
Mes: enero 2023
Serie Autoconsciencia -1) Inseparabilidad
SER-enidad
«Este enfoque o punto de vista, puede resumirse en esta premisa básica: sólo hay lo que siempre es».
«SER no puede “ser un no-ser” ni, por tanto, comenzar a ser o dejar de ser. Lo que ES, ES. Sin principio ni fin ni condicionamiento alguno. De modo que, si hay una Realidad que es y permanece siempre (y es obvio que la hay, todos somos testigos de su variopinta apariencia), más allá de las formas variables y transitorias en las que se manifiesta, entonces no hay otra cosa que dicha Realidad o Ser absoluto; y esa es, necesariamente, nuestra auténtica naturaleza o genuina identidad, que es incondicionada, ilimitada, plena, perfecta».
«No hay caminos, procesos o etapas para “llegar a ser” lo que siempre somos, porque no hay nada aparte de lo que siempre es/soy/somos. Solamente la sugestión de ser sujetos separados-limitados, habiendo asumido la cultural identificación con el nombre y la forma, vela virtualmente el recuerdo o reconocimiento de nuestra naturaleza auténtica. Podríamos decir que el actor, durante el rodaje de la película, se olvidó de sí y creyó ser el personaje que representaba, asumiendo como reales su identidad, forma, personalidad e historia personal ilusorias».
«Así, cuanto más se asume y se siente la íntima Realidad del Ser, nuestro estado natural de serenidad se desenvuelve y manifiesta de manera paulatina, como paz, confianza y contento incondicionados, no sujetos ya a ninguna circunstancia aparente.
Mas todo ese proceso no podría ser más que un sueño (aquel holograma, película u obra teatral de la que hablábamos), pues solo hay lo que siempre es-soy-somos: SER».
Álamo
Álamo en Telegram: estreno del canal oficial
SER-enidad
«Este enfoque o punto de vista, puede resumirse en esta premisa básica: sólo hay lo que siempre es».
«SER no puede “ser un no-ser” ni, por tanto, comenzar a ser o dejar de ser. Lo que ES, ES. Sin principio ni fin ni condicionamiento alguno. De modo que, si hay una Realidad que es y permanece siempre (y es obvio que la hay, todos somos testigos de su variopinta apariencia), más allá de las formas variables y transitorias en las que se manifiesta, entonces no hay otra cosa que dicha Realidad o Ser absoluto; y esa es, necesariamente, nuestra auténtica naturaleza o genuina identidad, que es incondicionada, ilimitada, plena, perfecta».
«No hay caminos, procesos o etapas para “llegar a ser” lo que siempre somos, porque no hay nada aparte de lo que siempre es/soy/somos. Solamente la sugestión de ser sujetos separados-limitados, habiendo asumido la cultural identificación con el nombre y la forma, vela virtualmente el recuerdo o reconocimiento de nuestra naturaleza auténtica. Podríamos decir que el actor, durante el rodaje de la película, se olvidó de sí y creyó ser el personaje que representaba, asumiendo como reales su identidad, forma, personalidad e historia personal ilusorias».
«Así, cuanto más se asume y se siente la íntima Realidad del Ser, nuestro estado natural de serenidad se desenvuelve y manifiesta de manera paulatina, como paz, confianza y contento incondicionados, no sujetos ya a ninguna circunstancia aparente.
Mas todo ese proceso no podría ser más que un sueño (aquel holograma, película u obra teatral de la que hablábamos), pues solo hay lo que siempre es-soy-somos: SER».
Álamo